El acné es un problema común en la piel que afecta a muchas personas en todo el mundo. A menudo, se asocia con la pubertad y la adolescencia, pero también puede afectar a adultos de todas las edades. El acné puede ser embarazoso y puede afectar la autoestima de una persona. Hay muchos remedios caseros y productos disponibles en el mercado que prometen curar el acné de forma rápida y eficaz, pero la mayoría de ellos no funcionan. En este artículo, te presentamos algunos productos para el acné que realmente funcionan.
El acné es una afección de la piel que ocurre cuando los folículos pilosos se obstruyen con sebo y células muertas de la piel. Esto puede causar puntos negros, espinillas o quistes llenos de pus. El acné se produce especialmente en la piel que contiene muchas glándulas sebáceas, como la cara, el cuello, el pecho, la espalda y los hombros.
El acné se produce cuando los folículos pilosos se obstruyen con sebo y células muertas de la piel. Las causas específicas del acné pueden variar de una persona a otra, pero las causas comunes incluyen:
Los limpiadores faciales con ácido salicílico o ácido glicólico son especialmente eficaces para tratar el acné. Estos ácidos ayudan a disolver el exceso de aceite y las células muertas de la piel que obstruyen los poros, lo que reduce la aparición de puntos negros y espinillas. Además, estos ácidos tienen propiedades antiinflamatorias y exfoliantes que ayudan a mejorar la textura de la piel y reducir el enrojecimiento asociado con el acné.
El peróxido de benzoilo es uno de los medicamentos más eficaces para tratar el acné. Funciona al matar las bacterias que causan el acné y reducir la inflamación de la piel. Los productos tópicos que contienen peróxido de benzoilo vienen en diferentes concentraciones y se pueden encontrar en forma de cremas, geles y lociones.
El ácido retinoico es un medicamento tópico que se usa para tratar el acné leve a moderado. También se conoce como tretinoína y es un derivado de la vitamina A. Ayuda a destapar los poros obstruidos y a exfoliar las células muertas de la piel. El ácido retinoico también puede ayudar a reducir la inflamación asociada con el acné y a prevenir la formación de nuevas espinillas.
Los antibióticos tópicos y sistémicos son medicamentos que se usan para tratar el acné moderado a grave. Los antibióticos tópicos, como la clindamicina y la eritromicina, se aplican directamente en la piel y ayudan a matar las bacterias que causan el acné. Los antibióticos sistémicos, como la doxiciclina y la tetraciclina, se toman por vía oral y también ayudan a reducir la inflamación y matar las bacterias del acné.
Los anticonceptivos orales pueden ser útiles para tratar el acné causado por cambios hormonales. Estos medicamentos ayudan a regular las hormonas y reducen la producción de sebo, lo que puede ayudar a reducir la aparición de espinillas y puntos negros.
La isotretinoína oral es un medicamento potente que se usa para tratar el acné grave y resistente a otros tratamientos. También se conoce como Accutane. Funciona al reducir la producción de aceite en la piel y disminuir la cantidad de bacterias que causan el acné. El uso de isotretinoína oral requiere la supervisión de un médico y puede tener efectos secundarios graves, incluida la sequedad de la piel, la irritación ocular y los problemas hepáticos.
El acné es un problema común de la piel que afecta a muchas personas. Aunque hay muchos remedios caseros y productos para el acné disponibles en el mercado, la mayoría de ellos no funcionan. En su lugar, se deben utilizar productos que contengan ácido salicílico, ácido glicólico, peróxido de benzoilo, ácido retinoico, antibióticos tópicos y sistémicos, anticonceptivos orales y isotretinoína oral para tratar el acné de manera efectiva. Es importante consultar a un médico o dermatólogo antes de comenzar cualquier tratamiento para el acné.